Las claves de la belleza libre de cirugía de Maribel Verdú a sus 54 años: “Practico yoga desde hace un montón de años y ando como si no hubiera un mañana”

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La actriz asegura que no se pincha botox ni se opera

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Sus fotos sin una gota de maquillaje causan sensación en las redes sociales

Actualizado a 27 de agosto de 2025, 14:33

Resulta impactante que Maribel Verdú, a sus 54 años, mantenga el rostro y la energía de su juventud sin haber pisado un quirófano con fines estéticos. “No me he puesto bótox ni me he operado, ni lo haré. Quiero envejecer con naturalidad, siendo yo”, asegura. Pero, si no recurre a la medicina estética, ¿cuál es su secreto para estar fabulosa? La respuesta está en sus rutinas. La emblemática actriz madrileña confiesa que no es una fanática del deporte, pero sí una mujer constante: yoga, meditación y caminatas forman el núcleo de su día a día, como ha compartido la protagonista de la serie Canguros.

Disciplina sin obsesiones

Verdú explicaba recientemente que la meditación, preferiblemente a primera hora de la mañana, es imprescindible: “Así afrontas el día de otra manera, te sientes mejor”. Su mejor consejo de belleza es simple pero poderoso: “Que en tu cara siempre haya una sonrisa”. Para lograrlo, Maribel confía en un inicio de jornada con respiración consciente y calma.

En cuanto al yoga, practica a diario un asana de estiramientos, un hábito que, además de flexibilidad, le ayuda a dormir mejor, calmar la ansiedad y reforzar el sistema inmunológico. La actriz destaca que, para estas rutinas, “como en casa, en ningún sitio”. En varias ocasiones ha señalado su preferencia por ejercitarse en su domicilio en lugar de acudir a gimnasios.

Que no vaya al gimansio no significa que no le encante salir de casa y, cuando lo hace, prefiere ir caminando a todos lados, siempre que sea posible, a buen ritmo. “Ando como si no hubiera un mañana”, afirma la propia actriz. Una amiga cercana, con quien suele dar largos paseos, lo confirma: “Camina todos los días. Va andando a todos los sitios. Todo el que la conoce lo sabe”. Sus tonificadas piernas son el resultado de esta gimnasia natural y sencilla.

En el ámbito deportivo, también incorpora entrenamientos de fuerza, sin excesos, pero con persistencia: “Dos veces por semana hago entrenamiento funcional de fuerza: fitball, gomas, TRX… esté donde esté”, confesaba en Women’s Health

Una dieta sin renuncias, pero compensada

A la hora de comer, la ganadora de varios Premios Goya asegura que no renuncia a nada. “Como de todo. Me encanta la carne, el pescado, los lácteos. El queso, disfruto con el queso. También picoteo entre horas y lo combino todo con mayonesa”, dice sin tapujos. Maribel es puro nervio y no tiene problemas para quemar calorías, pero uno de sus secretos reside en compensar con las rutinas deportivas ya mencionadas. “No se trata de prohibirse nada, sino de vivir desde la moderación y el equilibrio”, señala.

Descanso y autoestima

Preguntada por los secretos de su belleza tras superar el medio siglo de vida, Maribel destaca que estar a gusto con una misma es esencial: “Ahora soy una mujer que se siente segura, y creo que eso se refleja”. Además, subraya el valor del entorno: “Si tienes a alguien a tu lado que te valora, tu autoestima se fortalece y te hace sentir la persona más maravillosa del mundo”.

El descanso de calidad también es clave para ella: “Duermo mucho, entre ocho o nueve horas. Como no tengo hijos, no tengo que despertarme en mitad de la noche ni llevarlos al colegio. Tengo todo el tiempo del mundo para mí, para leer y para dormir. El día que descanso menos, siete horas, lo noto”, contaba a El Mundo hace unos años.

No es perfecta: reconoce que fuma

A pesar de su estilo de vida saludable, Maribel no oculta que fuma: “Lo hago desde siempre”, admite. Este hábito contrasta con su imagen de cuidado personal, pero encaja con su filosofía de “no renunciar a nada, pero con cabeza”, como repite a menudo.

Con nicotina o sin ella, Maribel Verdú está espléndida y las fotografías que publica sin maquillaje ni artificios en sus redes sociales causan sensación. Los comentarios se disparan y el resultado es unánime: está bellísima y muy natural.